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La Comunidad de Adoratrices Portugal estuvo presente como voluntaria y orante, compartiendo su amor y servicio, en la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) celebrada en Lisboa. Para ello se integró en el departamento de Vida Religiosa para la JMJ, participando en reuniones de información, programación y evaluación permanente. «Se nos pidió, directamente, ser “comunidad orante” desde nuestro Carisma, con la absoluta certeza de que, desde la Adoración se alcanzarían los frutos deseados para JMJ. Así lo hicimos, en las mañanas de los jueves del mes de julio, juntamente con los voluntarios, desplazándonos a la capilla creada para ese efecto, en la sede nacional de la JMJ. Fueron tiempos muy fuertes, de mucha emoción, intercediendo para que los jóvenes-peregrinos se dejaran tocar por la Gracia de Dios en sus corazones. Sin duda alguna, esta fue nuestra mejor contribución para la JMJ», señalan desde Adoratrices Portugal.
También participaron en las acciones organizadas por su parroquia, con y para los jóvenes, y trasladaron a los medios de comunicación que las entrevistaron la incidencia de su Carisma en la JMJ. La Hermana Júlia Bacelar compartió con los periodistas que “nuestra Casa de Acogida vive en permanente JMJ, en la medida en que comparte techo y mesa, a diario, noche y día, con múltiples culturas, religiones, vulnerabilidades, problemáticas de ‘nuestras’ mujeres».
Estuvieron presentes también en la Catedral, en la misa del final de la peregrinación de los símbolos de la JMJ, y la Comunidad de Coimbra participó en el Festival y en la Misa que la diócesis organizó al finalizar la semana previa a la JMJ.
En colaboración con la Red Mundial Talitha Kum y RENATE, participaron también en la Feria Vocacional de la Alegría en la que pudieron dar a conocer a los centenares de jóvenes que se acercaron al stand el fenómeno y la lucha contra la trata de personas y su explotación en los diversos aspectos. «Aprovechamos esta fantástica oportunidad para poner de relieve la labor significativa que, desde nuestro Carisma, desarrollamos en los países donde tenemos presencia adoratriz. Resultó algo extraño ver que los jóvenes, de España y de otros países donde trabajamos, no conocían a las Adoratrices, ni sus Proyectos, Carisma, Comunidades», señalan.
Asimismo, la cercanía de su Casa a la Colina del Encuentro facilitó su asistencia en las celebraciones que allí se realizaron: misa de apertura, acogida al Papa Francisco y Via crucis.
«Algunas de nuestras mujeres que ya están en autonomía, se hicieron voluntarias en la JMJ, dando un extraordinario ejemplo de superación y de que ‘otro mundo es posible’. Los 30.000 voluntarios contribuyeron de manera imprescindible en la realización de estas Jornadas. Sin su trabajo silencioso y discreto, no hubiese sido posible llevar a cabo este acontecimiento mundial», concluyen desde Adoratrices Portugal.
